SOBERANÍA entrevistó al doctor Ángel María Caballero, ex-presidente de Salvación Agropecuaria, histórico luchador y dirigente en defensa de la producción nacional y del arroz.
En buena medida, en Colombia todavía se produce arroz gracias a las expresiones de resistencia civil que Ángel María ayudó a organizar y dirigir para evitar que con el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos (EE.UU.) fuera borrado de un plumazo el cultivo del arroz nacional, producto básico para la alimentación del pueblo colombiano.
Sin embargo, el arroz colombiano vuelve a estar amenazado por la importación de arroz con aranceles muy bajos y con el contrabando proveniente fundamentalmente de Perú y Ecuador.

Ángel María Caballero durante una movilización contra el ALCA. Fotografía del archivo de Miguel Gordillo.
Periódico SOBERANÍA: ¿Cómo ve la situación de los productores de arroz en Colombia y, particularmente, en Tolima?
Ángel María Caballero: La historia se repite. Una industria molinera que maneja todo el mercado nacional. Una cantidad de productores que si no organizan una defensa con una base social fuerte, indudablemente el mercado se los lleva por delante.
Son muchas las familias en el departamento del Tolima que cobija alrededor de unas 100.000 hectáreas, en todo el departamento y, fuera de eso, en toda Colombia, que tienen que entrar a volver a las bases sociales que hicieron la defensa a la producción nacional de la que usted habla.
Los campesinos, los productores, los hijos de los productores tienen que volver a organizarse, para reclamarle al Gobierno y a todas las entidades nacionales e internacionales, cómo tenemos que entrar a defender lo que es nuestro. Porque el arroz, como el café, es un producto insignia de la economía colombiana.
Periódico SOBERANÍA: Está en manos del presidente Petro buscarle una solución a la crisis de los arroceros colombianos. ¿Cómo ve la actitud del Gobierno Nacional ante esta crisis?
Ángel María Caballero: La actitud del Gobierno, en lo que le hemos oído al doctor Petro, es que los productores de arroz se organicen en cooperativas para hacer empresas molineras, en los de la papa empresas paperas, en los de la yuca empresas yuqueras industriales. Todo eso es bueno. Pero hay una realidad: la economía del arroz hoy en día la mueven 3 marcas con una gran cantidad de capital, que al pequeño productor en la organización lo puede hacer, pero no le va a quedar muy viable. Porque la economía de escala fácilmente destruye a la mini economía.
Periódico SOBERANÍA: El planteamiento del presidente Petro de que cooperativicen e industrialicen el proceso y tengan utilidad los productores en cada una de sus capas… ¿Cómo se va a lograr, si es que las cooperativas también están en crisis?
Ahí está el ejemplo de la cooperativas cafeteras, que las embarco la federación en los negocios a futuro del café y ahí están… vendieron a precio barato y ahora que tienen que entregar la producción, el precio está a más de 4 dólares la libra de café. Algo similar puede suceder con las cooperativas arroceras.
Entonces, ¿cómo sería una solución práctica ante ese ofrecimiento del Gobierno?
Ángel María Caballero: No es fácil. Porque, para organizar una cooperativa, los arroceros lo primero que tienen que organizar son empresas molineras. Y, hoy en día, organizar una empresa molinera vale miles de millones de pesos. No son centavos. Partiendo de que la gran industria molinera, lo que es el descascaramiento, la molienda, la afinada, la refinada del arroz, es con tecnología láser y eso vale plata. Silos de almacenamiento, silos de secamiento, mercadeo del arroz paddy, financiar el mercadeo del arroz blanco, todo con sistema bancario es supremamente complicado, cuando el productor promedio casi no tiene ni con qué sacar su propia cosecha de arroz.
Periódico SOBERANÍA: ¿Usted cree que el Gobierno Petro tiene la voluntad de darle una solución real y efectiva a los productores?
Ángel María Caballero: Voluntad puede haber. Pero la voluntad no mueve el bolsillo, es la plata la que lo hace.
¿Cómo organizan empresas molineras unos productores de Saldaña, de Lérida, de Yopal o de cualquier municipio de cualquier departamento? ¿Cómo organizan un mercadeo de arroz paddy, para volverlo blanco, para empaquetarlo, para entrar a competir con las grandes marcas? Eso tiene que ser de la mano del Estado, el agricultor solo no puede.
Lo podría hacer de arroz, que es la que recoge las cuotas que le da el Gobierno. Pero, Fedearroz no ha podido todavía entrar a pelear con la gran industria molinera. Y la víctima es el agricultor.
Ahora, si puede hacer algo el Gobierno Nacional y es suspender las importaciones de arroz, para que el mercado nacional flote y se evite el contrabando. Si hay contrabando y hay importaciones de Ecuador, de Venezuela y de otros países, para nuestros productores nacionales es supremamente complicado entrar a competir con esas economías.

Ilustración digital de arroceros colombianos, generada por SOBERANÍA con herramientas de inteligencia artificial.
Periódico SOBERANÍA: El Gobierno se ve reacio a otorgar el subsidio para el almacenamiento que había dado en el pasado. ¿Cómo evalúa esa situación, de la poca o nula colaboración del Gobierno Petro para dar ese subsidio, que en algo mitiga la situación crítica de los productores nacionales?
Ángel María Caballero: Supremamente complicada, porque, si al Gobierno se le marchitó Icetex, si se ha marchitado el sistema de salud salud y se han marchitado varios sectores más, ¿con qué plata van a darle subsidios para que un agricultor pueda almacenar su cosecha y luego poderla vender y así tener una rentabilidad?
Sería ideal que dieran ese subsidio. Estados Unidos lo hace. Estados Unidos siembra 1.200.000 hectáreas, produce 9 millones de toneladas y recibe $1.300 millones de dólares de cajas del Gobierno, de regalo a sus productores. Pero no es la situación de Colombia, ni podemos competir con eso.
Periódico SOBERANÍA: Sobre la promesa de Petro durante la campaña electoral ―incumplida hasta ahora―, de renegociar el Tratado de Libre Comercio (TLC) con Estados Unidos, buscando mejores posiciones arancelarias… ¿Cuál sería su opinión al respecto?
Ángel María Caballero: Supremamente complicada las promesas de campaña de no cumplir los tratados de libre comercio. Porque, si no se cumplen los tratados de libre comercio, el señor Trump fácilmente le dice que va a subir los aranceles de todo lo que producimos o de lo que ellos nos exportan, y no vamos a ser capaces de pelear con ello.
Ya vimos las peleas que el presidente Trump está cazando con todo el mundo, con China, con Canadá por el acero, con México por los aguacates… a todo el que abre la boca, él dice que le pondrá aranceles a los productos que esos países exportan a Estados Unidos y a los productos que esos países importan de Estados Unidos.
Entonces, es supremamente complicado. Nosotros somos unas hormigas al lado del mercado norteamericano.
Periódico SOBERANÍA: ¿Cuál es su visión de futuro sobre la producción de arroz y, en general, de toda la agricultura y la ganadería de nuestro país? ¿Cómo ve usted el horizonte en la situación actual?
Ángel María Caballero: Un mercado mundial supremamente convulsionado. No tenemos bases científicas en el agro. La ganadería sería uno de los sectores que subsiste fácilmente, el sector cafetero, el sector de frutas exóticas, todo lo que no tenga competencia en el mercado internacional. Pero, lo que tenga competencia en el mercado internacional es supremamente complicado, porque nosotros no somos capaces de producir ni siquiera los insumos para sacar nuestras cosechas
Periódico SOBERANÍA: ¿Y frente al crédito? ¿Cómo ve el manejo de las tasas bancarias para poder mover el campo, para poder invertir, sembrar la cosecha y recogerla? ¿Cómo ve la política frente a las tasas de interés, que le facilitan los bancos ―como Finagro y la Caja Agraria― a los agricultores?
Ángel María Caballero: No están subsidiadas, realmente. En la situación en la que está el agro colombiano las tasas deberían estar por debajo del 10 % y eso no existe en la actualidad.
Ahora, para sacar un crédito hay que hipotecar absolutamente todo. Si no hay suficientes garantías hipotecarias, no le dan al agricultor, no es sujeto de crédito. Contrario a las economías de otros países. que subsidian la agricultura para que se desarrollen sus respectivas industrias nacionales, porque una agricultura fortalecida es capaz de fortalecer el sector de la maquinaria, el sector de los pesticidas, el sector de los productos biológicos… pero, se necesita la mano del Estado para que pueda haber agricultura.
Comenzando porque en Colombia se desbarató el ICA, que tenía más de 200 científicos que producían variedades de arroz, producían resistencia de las semillas a las plagas y las enfermedades. El ICA lo desbarataron y queda lo que haga la empresa privada con las uñas.
Periódico SOBERANÍA: Y la violencia recrudeciendo en los campos. ¿Esto no es un limitante para la producción nacional?
Ángel María Caballero: Sí, completamente. Ahí vemos que en Arauca, en Putumayo y en Tolima ya están invadiendo las partes altas.