De acuerdo al DANE, para el primer trimestre del 2024 la agricultura, ganadería, caza y pesca creció 5.5 % respecto al mismo periodo del 2023, lo estiran a 9,3 % cuando le pegan actividades de apoyo a la agricultura y conexas “como la caza deportiva, producción de pieles finas, cueros de reptiles o las plumas de ganso”. La cifra inicial empeora al descomponer el sector por ramas, encontramos que el cultivo permanente del café registra -3.6 %, ganadería bovina -0,01 %, caña de azúcar -0,1 %, y arroz -15,2 %, medidores superlativos porque reúnen más de un millón de productores y tres millones de empleos, y vienen en crisis.
Los cafeteros por su parte debido a la caída de la rentabilidad que los tiene recibiendo 2 dólares menos por libra de lo que recibían en 1980, y el agravante de las importaciones que aminora aún más el precio interno y presiona también la disminución y parcelación del área sembrada, se acentúan sus problemas de rentabilidad. Por su parte la ganadería bovina atraviesa crisis de precios de la leche originada en múltiples tratados comerciales con Europa, la comunidad Andina y del pacífico, más el carácter monopólico de multinacionales del sector, como Nestlé, que comercian entre subsidiarias y filiales en el país, integrando todo un sistema de gestión que vela por su rentabilidad sin importar la de los productores. Y viene la Alianza para la Prosperidad Económica en las Américas (APEP), que incluye a Estados Unidos y países latinos que en Colombia tienen cuotas libres de arancel para lácteos y comercio sin restricciones a corto plazo (Suárez, A. 20/06/2024. Semana)
Y el arroz, además de los impactos por los tratados, padece los ataques al incentivo de almacenamiento por parte del Ministerio de Agricultura, de ahí que los 19 comités arroceros, ante la caída actual de los precios del arroz paddy adquirido por la industria molinería, soliciten al gobierno de manera urgente un incentivo de almacenamiento para la cosecha que acaba de comenzar (Dataifx. 24/06/20204). Por último, la caña de azúcar, sostenida por los actuales precios y el sosiego de las salvaguardas a las importaciones de etanol, encuentra el desequilibrio en las crecientes importaciones azucareras que cada vez llegan en mayor número al mercado del retail, al cierre del 2023 este ítem aumentó en más del 100 % frente al año anterior.
Mientras tanto, el crédito de fomento agropecuario concentra el 75,5 % en grandes compañías, dejando el 11,3 % a medianas empresas y el 13,2 % a pequeños productores (Dangond, I. @indaleciodangond. 13/06/2024).
Ahora bien, aunque Petro y sus ministros torturan las cifras para anunciar como lo hace Bonilla, “minibonanzas cafeteras” donde nos las hay, o como el presidente, que “nunca antes la agricultura, por lo menos durante este siglo, había crecido a esos niveles”; la verdad es que los números precisos y la realidad de la agricultura, antes que un avance, indican un retroceso en materia de productividad y soberanía alimentaria.
Columna de opinión tomada de El Diario —el periódico de Pereira—.
Publicada el 27 de julio de 2024.
