Al incumplimiento por parte del Estado colombiano a la mayoría de las 210 órdenes de la Corte Constitucional para salvaguardar los derechos del pueblo Wayuú, definidas en la Sentencia T-302 de 2017 que declaró el Estado de Cosas Inconstitucional (ECI) en La Guajira, se suma el despojo territorial sistemático que sufren los Wayuú.
15 comunidades Wayuú han sido despojadas sin alternativas de reubicación digna y 36 ―ubicadas en las proximidades de la Troncal del Caribe― están amenazadas por desalojos arbitrarios ordenados y ejecutados por instituciones judiciales y del poder ejecutivo ―de orden nacional y local― que buscan expulsarlos de sus territorios para favorecer intereses de un grupo reducido de particulares y para realizar proyectos de infraestructura sobre los cuales no han sido debidamente consultados y no cuentan con el consentimiento previo, libre e informado de sus comunidades.
Periódico SOBERANÍA: ¿Cuál ha sido la respuesta del Gobierno Petro ante la situación?
Jazmín Romero Epiayu: Nula. El Presidente Petro nos da la espalda. Cuando vino a La Guajira, gobernó con las agendas de las transnacionales, favoreciendo a empresas eólicas y otras transnacionales que explotan recursos en nuestro territorio. No vino a implementar una agenda que incluyera nuestra economía. Vino en contravía de la soberanía de los territorios de los pueblos indígenas.
Periódico SOBERANÍA: ¿De qué manera se está organizando la comunidad para resistir?
Jazmín Romero Epiayu: Estamos en asamblea permanente interna, con la presencia de más de 15 autoridades indígenas que se suman a la lucha por la defensa del territorio. Durante ese proceso de reflexión interna, consideramos que ya agotamos todas las instancias de diálogo con el Gobierno, la Gobernación y la Alcaldía, no queda otra que movilizarnos pacíficamente por la defensa de nuestro territorio.
Para esto, acordamos tres puntos claves: primero, vamos a la resistencia, a la gran manifestación por la defensa y la dignidad de los territorios Wayuú; segundo, la conformación de un equipo técnico para la defensa del territorio; y tercero, la consolidación de alianzas con más de 63 comunidades Wayuú para resistir frente a los despojos. Hay que organizarse para construir un frente amplio que pueda determinar una lucha victoriosa por la defensa del territorio. Nuestros abuelos dicen que “Movernos del territorio es como aniquilar el sueño de los Wayuú. Es como matar el espíritu de los Wayuú”.
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